En Iguala culmina la jornada de lucha por los 11 años de la desaparición de los 43

–Madres y padres de Ayotzinapa recorrieron los puntos donde fueron encontrados tres estudiantes asesinados; exigieron al Ejército entregar información pendiente

Interacción

Iguala, Gro.– Con una marcha que recorrió sitios marcados por la tragedia, madres, padres y normalistas de Ayotzinapa cerraron este sábado la jornada de movilizaciones por los 11 años de la desaparición de los 43 estudiantes.
El contingente partió desde la zona industrial de Iguala, donde fueron colocadas ofrendas florales en las “Estelas de Luz”, memoria del hallazgo del cuerpo de Julio César Mondragón. Más tarde avanzaron hasta la calle Álvarez, en la esquina con Periférico Norte, sitio donde aparecieron los cuerpos de Daniel Cruz Gallardo y Julio César Ramírez Nava.
Decenas de autobuses trasladaron a jóvenes de la Federación de Estudiantes Campesinos y Socialistas de México (FECSM), quienes junto a los familiares caminaron bajo un operativo de Tránsito municipal que cerró calles para permitir el paso de la manifestación.
En cada punto, se realizaron intervenciones breves en las que se reiteró el reclamo central: verdad y justicia. Melitón Ortega, vocero de los padres y madres, agradeció la solidaridad de la ciudadanía durante los días de protesta iniciados el pasado 17 de septiembre en Tixtla, y denunció que en la megamarcha del 26 de septiembre, tanto el gobierno federal como el de la Ciudad de México limitaron el ingreso de los contingentes al Zócalo, lo que consideró un acto de cerrazón.
Las familias insistieron en que el Ejército Mexicano debe entregar la información que mantiene bajo resguardo —más de 800 folios— y recordaron que siguen pendientes las extradiciones de ex funcionarios implicados que huyeron al extranjero.
“Han pasado 11 años y algunos todavía nos llaman revoltosos. Pero nuestra única exigencia es la verdad sobre nuestros hijos y que se haga justicia”, señalaron durante la clausura de la jornada.

Quemaron tres camionetas distribuidoras en las puertas de Palacio de Justicia de Iguala

En el último día de actividades enmarcadas en el 11 aniversario de la desaparición de los 43 normalistas rurales de Ayotzinapa, integrantes de la Federación de Estudiantes Campesinos Socialistas de México (FECSM) quemaron tres camionetas en los accesos al Palacio de Justicia de Iguala y derribaron un portón para introducirse a dicho inmueble.
El ataque a las instalaciones del Poder Judicial local se desarrolló cuando los estudiantes ya se retraban de la ciudad cuna de la bandera nacional.
En esta ocasión llevaban tres camionetas distribuidoras de alimentos chatarra, las cuales colocaron en diferentes puntos para luego encenderlas.
Mientras las unidades ardían, los jóvenes lanzaban petardos al interior del inmueble.
Esta ocasión no pudieron derribar las bardas perimetrales, sin embargo, el portón principal sí cedió ante el impacto de una camioneta utilizada como ariete.
Acto seguido un grupo de jóvenes con el rostro cubierto se introdujo al inmueble para provocar daños.
Tras varios minutos la actividad concluyó y los líderes dieron la indicación de emprender la retirada.
Abordaron los autobuses y cuando comenzaban a desplazarse, personas desconocidas les lanzaron piedras desde la parte alta de un puente, situación que obligo a que prolongaran la retirada para investigar lo que sucedía.
Los desconocidos se alejaron corriendo de la zona, de tal manera que no se supo quienes habían atacado con piedra los autobuses de Ayotzinapa y la FECSM.
Regresaron a las instalaciones de la Normal Rural Raúl Isidro Burgos sin ningún lesionado ni detenido.